Hoy es mi último día de trabajo antes de las vacaciones. En teoría me iba a quedar hasta el día 9 en Barcelona pero me ha surgido la oportunidad de irme antes. Es ideal para mi hijo, porque en Barcelona hace calor, apenas se puede estar en la calle a según que horas, las ofertas de ocio baratas son limitadas y no siempre del todo accesibles. En cambio en la playa tiene arena para jugar, agua, fresquito en el patio de casa, un montón de actividades veraniegas… ¿qué niño no se lo pasa mejor en el pueblo de vacaciones que en la ciudad?
Así que seguramente mañana o como muy tarde pasado me marche, adelantando las vacaciones una semana y media.
Lo bueno ya lo he dicho: sol, aire fresco, playa, piscina, relax…
Lo malo, que no voy a tener ordenador (mi portátil ya no se conecta a Internet y sólo sirve para escribir). Eso por un lado me evita distracciones, pero me limita mucho en cuanto a publicación y actualización. Así que lo voy a tener que dejar todo cerrado hoy o como mucho mañana.
Lo bueno es que el capítulo de mañana está prácticamente escrito, sólo hay que hacer algunos cambios y añadidos y ajustes. Espero que eso signifique que no me va a costar demasiado.
Ja.
En fin, que seguramente esta sea una de mis últimas entradas hasta septiembre, así que espero que paséis unas buenas vacaciones, los que podéis hacerlas. Y los que no, ¡siempre podéis entreteneros leyendo Dioses muertos!